El África subsahariana y partes de Asia son especialmente vulnerables, donde los agricultores dependen en gran medida de la lluvia en lugar del riego y tienen menos recursos para adaptarse a las condiciones cambiantes. Pero las potencias agrícolas tampoco se salvan. Bajo un calentamiento severo, muestran las mayores pérdidas de rendimiento, con caídas que alcanzan el 40% en estas regiones.
El cambio climático reducirá drásticamente las cosechas, amenazando nuestra alimentación
Publicado el
jueves, noviembre 13, 2025

