
San Lorenzo de Almagro atraviesa un momento institucional muy importante de cara a su futuro. Marcelo Moretti dejó de ser el presidente, ya que el Juzgado civil N° 51 rechazó su pedido para anular la acefalía en el club, y de esta manera, quedaron firmes las renuncias de 14 dirigentes, integrantes de la última comisión directiva. La gestión provisoria encabezado por Sergio Costantino comandará la institución hasta el 30 de mayo, día elegido para que se lleven a cabo las elecciones a presidente.
Mientras tanto, el presidente interino deberá afrontar varios desafíos. Primero, está obligado a levantar 14 inhibiciones, que equivalen a más de tres millones de dólares, para poder sumar caras nuevas en el 2026. “No queremos tocar el patrimonio del club para levantar las inhibiciones”, aseguró en diálogo con DSports radio, dejando en claro que lo último que quiere es vender juveniles de la cantera para pagar deudas.
El segundo desafío que tendrá este gobierno interino será hacerse cargo de las deudas que existen con los jugadores del plantel, entre sueldos y primas, que alcanza los tres meses de retrasos. Y el tercer desafío tiene que ver con el mercado de pases, vital para renovar cuatro contratos, negociar las salidas de futbolistas y las llegadas de refuerzos, una condición fundamental para el cuerpo técnico con la idea de encarar la temporada 2026.

Según pudo averiguar Infobae, en los últimos días hubo una reunión entre Chiche Costantino y Damián Ayude en Ciudad Deportiva para hablar sobre el futuro del plantel de Primera. Hubo otra charla más informal y por teléfono el lunes pasado por la noche, luego de que el mandamás interino le ganase a Matías Lammens por 35 a 31 en los sufragios para encabezar la nueva comisión directiva interina.
En el último cónclave, el DT le pidió al presidente que no le desarmara el plantel, que no haya muchas ventas, y mucho menos de los futbolistas que son habituales titulares. El titular interino le transmitió tranquilidad y le dijo que “van a llegar refuerzos”.
En esa primera reunión cara a cara, Ayude le dio dos nombres que le gustan para sumar como refuerzos: Ulises Ortegoza, mediocampista de Talleres de Córdoba, que tiene contrato por un año más, y Gonzalo Abrego, volante de Godoy Cruz de Mendoza.
El plantel arrancó los trabajos en Ciudad Deportiva, donde realizará la primera parte de los entrenamientos, con evaluaciones físicas y puesta a punto inicial. Mientras tanto, en los pasillos de Ciudad Deportiva aseguran que los jugadores no se trasladarían los primeros días de enero a San Nicolás para continuar la pretemporada y la dirigencia trabaja a contrarreloj para encontrar alguna otra opción acorde con el complejo escenario financiero. Entre los destinos posibles están: el Hindú Club de Don Torcuato y Mar del Plata.

Luego, los trabajos continuarán en Montevideo para disputar la Serie Río de La Plata en Uruguay.
El Ciclón disputará dos amistosos entre el 14 y el 17 de enero frente a Nacional o Peñarol en el mítico estadio Centenario de Montevideo, y contra Cerro Porteño en el Campus de Maldonado. En dicho torneo participarán también Colo Colo de Chile, Independiente de Avellaneda, Huracán y Alianza Lima. A fin de mes, debutará frente a Lanús en el Nuevo Gasómetro por la primera fecha del Apertura.
El primer jugador que tiene que renovar contrato es Ezequiel Cerutti, a quien se le vence el vínculo a fin de año y ya manifestó su deseo de continuar. El delantero, de 33 años, se transformó en un referente del plantel y uno de los más reconocidos por el hincha azulgrana en la última temporada, por su entrega y juego. “Ayude llamó al Pocho y le pidió que se quede. Costantino también lo llamó para tenerlo en San Lorenzo”, le confirmaron a este medio desde el entorno del jugador. El representante del atacante, Sebastián Celoria, aún no recibió el llamado de la dirigencia para cerrar la renovación del futbolista que disputó 203 partidos con la casaca azulgrana. “La prioridad del Pocho es seguir en San Lorenzo, a pesar de que tiene tres propuestas de otros clubes del fútbol argentino”, le aseguró su agente a este medio.

El 31 de diciembre vencerán otros vínculos como los de Andrés Vombergar, Emanuel Cecchini y Nery Domínguez. El delantero esloveno argentino quedó relegado en la consideración de Ayude por el buen momento que atraviesa Alexis Cuello. La Bomba jugó ocho partidos, de los cuales dos fueron como titular, y sin convertir goles. Además, su contrato elevado lo aleja de Boedo y no continuará en el 2026. Buscará otros horizontes. Es más, dos clubes brasileros sondearon al centrodelantero de 31 años. Corinthians, campeón de la Copa Brasil, y Vasco Da Gama pusieron los ojos en él y hablaron con su entorno. También el León de México hizo un ofrecimiento. En junio pasado, cuando vinieron a buscar al goleador desde el exterior, la dirigencia azulgrana pidió 5 millones de dólares por la ficha, pero el futbolista prefirió permanecer en Boedo.
Por su parte, el volante ex Banfield también perdió terreno en el equipo titular por el buen presente de Francisco Perruzzi y la posibilidad de que vaya sumando más minutos el juvenil Juan Cruz Rattalino. En este 2025, disputó 27 partidos, sumando 120 minutos en los últimos seis meses, y marcó un gol. Por este motivo, tiene los días contados en Boedo y buscará una salida. Nery Domínguez, por su parte, podría extender su contrato por otros 12 meses, ya que es una pieza clave de recambio, y aporta voz de mando en el vestuario. Ayude considera que el jugador, de 35 años, aporta su experiencia. Puede jugar de marcador central o volante, lo cual le brinda alternativas al entrenador. Mientras, todo indica que Facundo Altamirano y Diego Herazo se irán en condiciones de libres, ya que inhibieron al club por deudas que tiene con ellos.
Por otra parte, para Ayude hay un futbolista que es intransferible: Alexis Cuello. El director técnico le transmitió al mandamás del club que haga un esfuerzo para mantenerlo en el plantel para disputar la Copa Sudamericana 2026. “Por Cuello no hay nada oficial. Son trascendidos”, deslizó un dirigente muy importante.
El presidente azulgrana entiende que San Lorenzo deberá vender a un futbolista para achicar las deudas con el resto de los integrantes del plantel y levantar las inhibiciones para sumar refuerzos. Entre Johan Romaña, Gastón Hernández, Elías Báez y Cuello, como mínimo, uno se irá. El defensor colombiano es el apuntado para salir en este mercado de pases, ya que cumplió un ciclo y lo hizo de la mejor manera. Pero el defensor quiere tener un salto en su carrera e irse al exterior, que sería lo que pretenden tanto la dirigencia y como el entorno del jugador. El defensor colombiano está tasado en 4,5 millones de dólares. “No recibimos ningún llamado por Romaña ni por Hernández. Vamos a pedir el 100 por ciento por cada ficha”, asegura otro dirigente que integra la nueva comisión directiva.
En medio del posible recambio que se avecina en el Santo, con salidas que parecen inevitables y con la incertidumbre de si habrá refuerzos o no, al club deben regresar 12 jugadores de sus préstamos a partir del primero de enero.
Tras un año en Barracas Central, Nahuel Barrios deberá volver a Boedo y probablemente Ayude lo tenga en cuenta, sabiendo la capacidad y la experiencia del enlace. Otro de los regresos que más atención genera es el de Tomás Silva, quien viene de consagrarse campeón del Torneo Apertura con Platense. El Calamar tiene tiempo hasta fin de mes para ejecutar la opción de compra de 400 mil dólares por el 50% del pase, pero por ahora no hay una resolución confirmada.
Por otra parte, Franco Lorenzón, marcador central de 24 años que tuvo una muy buena temporada en Deportivo Morón, finaliza su préstamo el 31/12 y quedará libre. San Lorenzo deberá resolver si se queda o se va. La prioridad del defensor es permanecer en Boedo. Además, deberán regresar al club dueño de su pase los porteros Lautaro López Kaleniuk (Atlanta) y José Devecchi (Sarmiento de Junín); los defensores Francisco Flores (Quilmes), Jeremía James (Magallanes de Chile), Agustín Lamosa (San Telmo) y Diego Calcaterra (Cúcuta Deportivo de Colombia), y los delanteros Simón Pérez (Alianza Atlético de Perú), Thiago Perugini (Barracas Central) y Juan Ignacio Goyeneche (Midland).
Algunos podrían ser cedidos nuevamente, otros quedarán en libertad de acción, y un grupo reducido tendría la oportunidad de pelear un lugar en el plantel profesional. Mientras tanto, el Ciclón transita el mercado de pases en medio de un reacomodamiento institucional, con más interrogantes que certezas y con un gobierno provisorio que tendrá que moverse rápido para cumplir varios desafíos importantes que marcarán el futuro de Boedo.
Crédito de las fotos: @SanLorenzo

